En qué se diferencian el alambique y un destilador

El alambique es un aparato para destilar líquidos, el destilador también. Vamos a hablar de las pequeñas diferencias que los separan en este artículo.

¿Cómo es el alambique?

Un alambique es un aparato utilizado para realizar procesos de destilación. Consiste en un recipiente cerrado con un tubo de salida, donde se coloca la sustancia que se va a destilar.

El alambique aprovecha la diferencia de puntos de ebullición de los componentes de la sustancia para separarlos y obtener un producto destilado de mayor pureza.

Es comúnmente utilizado en la producción de bebidas alcohólicas, como el whisky y el ron. También en la extracción de aceites esenciales de flores y plantas.

¿Qué es un destilador?

Un destilador es un sistema similar a un alambique, pero con algunas diferencias importantes. A diferencia del alambique, un destilador no tiene un recipiente cerrado, sino que utiliza un sistema de enfriamiento para condensar los vapores y recolectar el producto destilado.

Esto lo hace más eficiente y fácil de usar. Los destiladores son ampliamente utilizados en la industria química y farmacéutica para la producción de solventes, extractos y compuestos puros.

A diferencia de un alambique, un destilador no se utiliza específicamente para producir alcohol, sino que se emplea en una amplia variedad de aplicaciones, entre ellas, la obtención de agua purificada.

En qué se basa la destilación de ambos

¿Qué ocurre bajo la tapa del alambique?

El funcionamiento de un alambique se basa en el principio de la destilación. La sustancia se calienta en el recipiente cerrado, lo que provoca la evaporación de los componentes con puntos de ebullición más bajos. Estos vapores ascienden por el tubo de salida y se dirigen hacia el condensador, donde se enfrían y se convierten en líquido nuevamente. El líquido condensado, que contiene los componentes más volátiles y puros, se recoge en un recipiente separado.

¿Cómo funciona un destilador?

El funcionamiento de un destilador es similar al de un alambique, pero con algunas diferencias debido a los diferentes tipos de destiladores que existen.

El destilador utiliza un sistema de enfriamiento para condensar los vapores de la sustancia que se está destilando.

Los vapores se dirigen hacia el condensador, donde se enfrían y se convierten en líquido. El líquido condensado se recoge también en un recipiente separado.

Aplicaciones del alambique y el destilador

El alambique es ampliamente utilizado en la industria de las bebidas alcohólicas. Se utiliza para destilar licores como el whisky, el ron y el vodka, permitiendo obtener productos de mayor calidad y pureza.

Además, también se utiliza en la producción de aceites esenciales, perfumes y productos aromáticos. Su diseño tradicional y el cobre del que está hecho lo convierten en una opción popular para aquellos que buscan calidad y autenticidad en sus productos.

El destilador tiene una amplia variedad de usos en diferentes industrias. En la industria química, se utiliza para producir solventes y compuestos puros.

En la industria farmacéutica, se utiliza para obtener extractos de plantas y compuestos medicinales. También se utiliza en la producción de aceites esenciales, perfumes y productos químicos.

Su diseño moderno y su eficiencia lo convierten en una opción preferida para aquellos que buscan una destilación precisa y rápida.

 

En resumidas cuentas, la diferencia entre un alambique y un destilador radica en su diseño y funcionamiento, sin olvidar el propósito de la destilación.